La vida de los famosos no es solamente lo que uno ve a través de la pantalla, hay mucho detrás que realmente es desconocido y fueron construyendo las personas que son hoy. Marcelo Polino, por ejemplo, es uno de ellos y dio detalles de su historia en una entrevista con Mario Pergolini en "Otro día Perdido".
En un diálogo sincero, Polino contó como fueron sus primeros pasos apenas llegó a Buenos Aires desde, su ciudad natal: "Soy mago, empecé con los trucos de magia. Cuando me vine de Tres Arroyos a Buenos Aires viví en la casa de mis padrinos un año hasta que gentilmente me invitaron a retirarme, no por algún conflicto en particular, sino porque ya me habían mantenido gratis bastante tiempo".
Cuando la vida más sencilla se terminó, comenzaron las aventuras de Polino y su instinto de supervivencia se activó: "Yo no quería volver a Tres Arroyos, de eso estaba seguro, pero un día empecé a pasar hambre, dormía en una plaza cercana al Obelisco, no la pasaba bien. Caminaba por calle Corrientes todos los días, hasta que encontré un pequeño local que vendía artículos de magia y me compré, con la poca plata que tenía, tres trucos".
Quien seguía muy atento el detalle de la conversación fue Mario Pergolini que se vio sorprendido por la decisión de Polino: "¿No tenías para comer y te compraste tres trucos?", señaló, a lo que Polino fue concreto: "Mi razonamiento fue invertir en lo poco que tenía para animar fiestas infantiles. Y así fue como empecé mi carrera de mago".
Marcelo Polino tomó ese poco dinero que tenía y se compró: "Una varita mágica que se transformaba en un ramo de flores, un globo que lo pinchabas y aparecía una paloma de goma espuma, porque no me alcanzó para la real, y el otro era un cubo que cambiaba de colores". Y viajando al pasado, recordó con una sonrisa: "Lo más gracioso es que un día me enteré que Pipo Pescador necesitaba un mago y me presenté. Y entre tantos magos, éramos como 20, me eligió a mí, yo no lo podía creer. Le pregunté porqué me eligió y me contestó 'porque sos carismático y angelado'. Y hace 35 años estoy agarrado de esa frase, que no sé qué quiere decir, pero que me trajo hasta acá".