El robo a la casa de Carolina “Pampita” Ardohain sigue dando que hablar. Primero fue el ingreso de las 7 personas a s casa, después el robo de joyas, dinero, objetos de valor y la caja fuerte completa con celulares que tenían imágenes de Blanquita, su hija fallecida. Después fue el momento de la recuperación y así sigue hoy el minuto a minuto de la investigación.
Esta tarde, en “Intrusos”, Mauro Szeta habló del robo y hubo una frase que subrayó todo su sentir en cuanto a este robo… “A mí todo esto me parece muy extraño”. El periodista habló de dos sensaciones muy fuertes al enfrentar este hecho: “Por un lado se siente como un enorme plan delictivo para nada y por otro lado queda como que la banda que robó es ‘la banda del fracaso’”.
Fiel a su estilo, Mauro le puso su sello a la información: “Rari, como dicen los chicos. En la Argentina donde nadie devuelve nada de lo afanado, apareció la caja fuerte abierta, con los celulares adentro, ahora nos enteramos por Burlando que son cuatro los teléfonos recuperados. Hubo un alma honesta que dijo voy a llamar porque ahora me veo en la necesidad de decir que lo teléfonos que me llevé de forma indebida son de ‘Pampa’”. Eso “rari” de lo que hablaba Mauro Szeta encamina a una fuerte sospecha: hubo un entregador para el robo, ahora hay que saber quién es.
Sentado en el piso de “Intrusos”, Mauro Szeta ahondó en las versiones que circulan detrás del robo a la casa de la modelo: “La verdad, parece un hecho con un montón de logística y organización y un final pedorro. En teoría hay un entregador que dice: ‘vayan a robar a la casa de ‘Pampita’ que no hay nadie y está de viaje. Entren por la parte de atrás que es la más vulnerable y después bajen la caja del primer piso y sáquenla por la puerta de adelante con el riesgo que es eso, todo para abrirla de manera rudimentaria en la zona de Lanús y dejarla abierta con los celulares adentro”.
El periodista hizo pie en lo extraño que le resulta todo lo sucedido y la manera en que finalmente aparecieron los celulares que tanto reclamaba “Pampita”, con imágenes de Blanquita, su hija fallecida. “Semejante plan para eso, la verdad que el entregador es malísimo. Es un montón de gente que participó. Siete personas estuvieron adentro de la casa, se habla de un auto con patente adulterada y dos autos más. Estuvieron 6 horas adentro, morfaron, se nota que abrieron las gaseosas, le dieron vuelta las carteras, rompieron todo, pero no se llevaron ni un televisor”.