El documento turco es claro. Mauro Icardi va con todo contra Wanda Nara. Quiere la restitución internacional de sus hijas y llevarlas a vivir junto a él y "La China" a Turquía, donde seguirá su carrera como futbolista en el Galatasaray. Obviamente, este documento que recibió la mediática en las últimas hotras de ayer miércoles, cambió radicalmente su humor y sus proyectos inmediatos como mamá.
El documento que mandó Mauro Icardi a través de sus abogadas habla de restitución, pero en otro párrafo del mismo señala que Wanda las habría tarído a la Argentina por un tiempo para volver y que eso nunca pasó... yendo un poco más allá con sus expresiones y terminar hablando, incluso, de secuestro.
Entre los papeles y datos que sumó Mauro Icardi a este documento, se encuentra una planilla en la que fue comunicando los días que Wanda no estuvo con sus hijas en los últimos dos años. Detalle por detalle, cronometrado... El futbolista puso fecha, destino y tiempo de ausencia cada vez que Wanda se iba de su casa por trabajo, descanso e, incluso, sus viajes de reconciliación.
Con estos detalles, Mauro habría querido poner sobre la mesa, en esta pelea por la restitución, que la mediática estuvo muy poco tiempo con sus niñas y él era quién se encargaba de cuidarlas, dormirlas, ocuparse de sus tareas y demás detalles de la vida cotidiana. La información que fue detallada por Rodrigo Lussich en "Intrusos" se completó cuando el periodista señaló: "Icardi dice que en total fueron 122 los días que Wanda estuvo con sus hijas. Y el total de los días que estuvieron separadas fueron 452. Esto presenta Mauro ante la Justicia para decir ‘¿qué quiere Wanda con las hijas si no está nunca? Si no las acuesta para dormir, si no está como madre cuando las necesita. Si las que las crió y estuvo con ellas fui yo’".